La arquitectura, es la expresión física de la vida de la gente, en un determinado tiempo y una determinada época. Y las ciudades son tanto hechos físicos como sociales, cruzados por la cultura, la historia y la individualidad de cada uno de sus habitantes. Durante el siglo pasado el pensamiento urbano trabajaba sobre lo que necesitaban las ciudades para crecer y/o desarrollarse y su consiguiente impacto en la vida de sus habitantes.

Hoy atravesamos un sinceramiento sobre los complejos y crecientes desafíos que enfrentan las ciudades, producto de su auge en el último siglo como territorio físico y político subnacional. Ahora son las personas quienes manifiestan sus necesidades de forma más clara que nunca, siendo las ciudades las responsables de mantener y mejorar su calidad de vida. La disciplina del pasado, en manos de arquitectos, urbanistas e ingenieros viales se enfrenta a un mundo hiperconectado, globalizado y necesariamente interdisciplinar que exige un enfoque amplio en la búsqueda de una ciudad sostenible, equitativa y centrada en las personas.

Las denominadas “ciudades inteligentes” son aquellas que observan, escuchan y entienden a los ciudadanos para satisfacer sus necesidades y ayudarlos a realizarse de acuerdo con sus deseos y objetivos. Por lo tanto, el desarrollo urbano sostenible implica un abordaje holístico, que tenga en cuenta no solo lo físico, sino también lo económico, lo ambiental y lo social. Se requiere de una metodología flexible y rigurosa que permita viabilizar y ejecutar proyectos transformadores desde la gente.

Lograr ciudades a escala humana no se trata de medidas, sino de ceremonias y rituales manifestadas en las intervenciones urbanas, escenario físico y fundamental para la apropiación y disfrute de la infraestructura y el espacio público. La mirada antropológica rompe con la idea de “sujeto universal” típico destinatario del urbanismo y se centra en las personas desde el enfoque de la diversidad tanto de género, etaria, cultural o de clase, entre otras.

Buscaremos transmitir el aspecto social de una nueva visión del urbanismo, considerando la sostenibilidad económica, ambiental y social de los proyectos y la planificación urbana. Este será un espacio de formación y reflexión en torno a teoría, experiencias y herramientas de diagnóstico, análisis, desarrollo y gestión de proyectos urbanos a partir de una mirada integral con las personas en el centro.