Contextualización

En las últimas décadas, la expansión urbana en la Región Metropolitana de Río de Janeiro se ha producido a un ritmo promedio de 30 km² por año. La mayor parte de esta expansión se ha producido en asentamientos informales, lo que ha exigido una inversión considerable en infraestructuras y equipamientos urbanos.

Evolución de la Zona Urbana de Ocupación del Territorio Metropolitano

Para comprender mejor la ocupación de la Región Metropolitana de Río de Janeiro, es crucial considerar los procesos político-institucionales que han configurado el espacio metropolitano a lo largo de su historia. La ciudad de Río de Janeiro, inicialmente capital del país, perdió este estatus, así como la ciudad de Niterói, que también vio disminuir su posición jerárquica en la red de ciudades de Río de Janeiro. A pesar de la presencia del concepto de Región Metropolitana en la planificación nacional desde la década de 1970, la RMRJ estuvo durante muchos años sin un organismo metropolitano que coordinara las estrategias de planificación integrada.

Con el nivel metropolitano formalizado a través de la legislación local, el Plan Estratégico de Desarrollo Urbano Integrado (PEDUI) emerge como un instrumento integral, delineando en detalle los diagnósticos de la Región Metropolitana de Río de Janeiro. Su elaboración se produjo a través de un proceso que implicó un análisis profundo de las dinámicas urbanas, considerando factores como el crecimiento de la población, los patrones de uso del suelo, la infraestructura existente y las demandas emergentes.

En estas evaluaciones, PEDUI identifica específicamente las demandas apremiantes de la región y propone lineamientos estratégicos para resolver estas demandas. Estos, a su vez, tienen como objetivo resolver los desafíos urbanos de manera sostenible, alineándose con los principios del desarrollo integrado y considerando la longevidad de las soluciones propuestas.

A partir del diagnóstico, la visión de futuro y los debates sostenidos durante la elaboración del PDUI/RMRJ, se identificaron puntos estratégicos clave a alcanzar para el 2040. Entre ellos, se destaca la contención de la expansión urbana desordenada en la Región Metropolitana de Río de Janeiro. El objetivo es evitar la sustitución de las zonas rurales por asentamientos precarios, dirigiendo el crecimiento urbano hacia regiones con infraestructuras, sistemas de transporte, ocupación de vacíos urbanos y densificación de áreas específicas.

En el contexto presentado por el Plan Estratégico de Desarrollo Urbano Integrado (PEDUI), el Arco Metropolitano, Carretera Rafael de Almeida Magalhães, es una carretera de alta relevancia logística y también permea buena parte de las unidades de conservación ambiental municipales, estaduales y federales. El Arco Metropolitano tiene una longitud de 145 km y fue inaugurado en 2014. Esta autopista rodea la Región Metropolitana de Río de Janeiro y tiene como objetivo desviar el tráfico pesado que atraviesa la ciudad de Río de Janeiro, proporcionando una reducción significativa de la congestión en las principales vías de acceso a la ciudad.

El Plan Estratégico de Desarrollo Urbano Integrado (PEDUI) presenta una proyección de crecimiento poblacional en la Región Metropolitana de Río de Janeiro (RMRJ) hasta el horizonte de 2030. Según el estudio relacionado con el Arco Metropolitano, se estima un incremento de 1.362.832 habitantes en el periodo de 2010 a 2030. Esta proyección es relevante para comprender y planificar el impacto del crecimiento poblacional en la región, permitiendo la adopción de medidas y estrategias adecuadas para el desarrollo urbano sostenible.

Junto con otros datos del Plan Estratégico de Desarrollo Urbano Integrado (PEDUI), el plan interpreta la información y concluye que el patrón de expansión urbana, caracterizado por la expansión de la mancha urbana en lugar de su densificación en lugares favorables, resulta en un aumento del déficit de infraestructura. Además, este modelo requiere inversiones adicionales para la calificación del territorio, comprometiendo el aprovechamiento del potencial económico de la región y puede impactar negativamente en zonas de fragilidad ambiental, donde, en general, existe el mayor grado de expansión desordenada por tratarse de una “zona vacía”. Este análisis refuerza la importancia de dirigir estrategias de desarrollo urbano más sostenibles y eficientes para optimizar el crecimiento y la calidad de vida en la Región Metropolitana de Río de Janeiro.

Entre los lineamientos estratégicos destacados en el Plan Arco Metropolitano, cuatro de ellos están directamente relacionados con la temática abordada, ellos son:

  • Asegurar el manejo de las áreas protegidas y la conservación de la biodiversidad a través de la elaboración o revisión de los Planes de Manejo/Manejo de las Unidades de Conservación que se encuentren cercanas o cercanas al Arco, definiendo criterios y restricciones de uso que garanticen la protección de los recursos naturales, en cumplimiento de los lineamientos para la ordenación del territorio;
  • Asegurar el desarrollo de actividades económicas sostenibles (de bajo impacto ambiental) en las inmediaciones de las Unidades de Conservación o dentro de los APAs, que apoyen el desarrollo de la agricultura ecológica, el turismo rural y las actividades que valoricen el uso sostenible del suelo en pequeñas propiedades agrícolas;
  • Establecimiento de criterios para la concesión de licencias ambientales de proyectos a lo largo del Arco;
  • Asegurar la disciplina de uso y ocupación del suelo, especialmente en lo relacionado con los vacíos urbanos, las zonas de amortiguamiento y las áreas de influencia directa del Arco;

Zonificación y el Arco Metropolitano

Reconociendo la relevancia del Arco Metropolitano y la necesidad de contener la expansión desordenada en su entorno, el Plan Estratégico de Desarrollo Urbano Integrado (PEDUI) propone, en sus programas de acción prioritarios, una iniciativa centrada en el desarrollo sostenible del territorio periurbano de la Región Metropolitana de Río de Janeiro (RMRJ) – el Arco Rural (Agroecológico). Esta acción abarca la región rodeada por el Arco Metropolitano, buscando promover el desarrollo sostenible en áreas predominantemente rurales, ubicadas en las afueras de la urbanización y en las regiones periurbanas al norte del Arco Metropolitano.

El objetivo principal de esta acción es apoyar la gestión responsable de los recursos naturales, alineada con el desarrollo socioeconómico de las comunidades rurales. Esto se logrará a través de la promoción de prácticas sostenibles y de alto valor agregado, como la producción agroecológica y orgánica, el fomento de la agroindustria, la estimulación del turismo rural y el fomento de la investigación científica, entre otras iniciativas. Además de contribuir a la contención de la expansión urbana, estas prácticas tienen como objetivo preservar los activos ambientales y reducir las amenazas a la biodiversidad.

Acción para el Desarrollo del Corredor Agroecológico:

MS 01 Formulario de Acción – Arco Rural (Agroecológico) – PEDUI/RMRJ

La acción anterior enfatiza que las iniciativas para este desarrollo sostenible dentro del territorio periubarno deben considerar el desarrollo rural, como la asistencia técnica para la producción, la recuperación de suelos, el financiamiento de instalaciones productivas, la recuperación de manantiales y la reforestación.

El proyecto “Corredor Agroecológico”

La metodología desarrollada para la aplicación del Corredor Agroecológico a lo largo del Arco Metropolitano, tal como lo requiere la acción MS 01, implica la creación e implementación de unidades denominadas “Agro Vilas”. Estas Agroaldeas son puntos estratégicos a lo largo del corredor, donde se promoverán prácticas que fomenten tanto la agricultura sostenible como la preservación de la biodiversidad.

La elección del término “Agro Vilas” como nombre para estas unidades sigue las directrices del Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE). Esta nomenclatura busca resaltar la vinculación con la agricultura (representada por el término “Agro”) y la idea de comunidad o pequeño núcleo (representado por el término “Vilas”).

La metodología para la implementación de Agro Vilas puede incluir varios pasos, tales como:

  1. Identificación de sitios a lo largo del Arco Metropolitano que tengan potencial para la creación de Agro Vilas, teniendo en cuenta criterios como disponibilidad de tierras, condiciones ambientales favorables, cercanía a comunidades locales, entre otros.
  2. Evaluación detallada de las características naturales y socioeconómicas de cada sitio elegido, incluyendo estudios de biodiversidad, análisis de suelos, encuestas socioeconómicas de la población local, entre otros.
  3. Desarrollo de planes de acción específicos para cada Agroaldea, teniendo en cuenta las necesidades y potencialidades locales, así como los objetivos del Corredor Agroecológico en su conjunto.
  4. Implementación de prácticas agrícolas sostenibles, como la agricultura orgánica, la agroforestería, el manejo integrado de plagas y el cultivo de especies nativas, con el objetivo de promover la conservación de la biodiversidad y la producción de alimentos saludables.
  5. Establecer alianzas con instituciones locales, gubernamentales y no gubernamentales, así como con agricultores y comunidades locales, para asegurar el compromiso y la participación activa en la implementación y gestión de Agro Vilas.

Durante el análisis realizado a lo largo del Arco Metropolitano, se examinaron varios aspectos basados en datos públicos. Entre estos aspectos, se identificaron los cuerpos de agua presentes en la región, la vulnerabilidad a inundaciones, la configuración del relieve y el análisis de las áreas en Unidades de Conservación establecidas por la legislación local, estatal o federal.

Con esto, se encontraron 4 puntos estratégicos, a saber:

A partir de la identificación de los puntos estratégicos, se pueden hacer algunas observaciones significativas:

  • Cambios en el uso y ocupación del suelo urbano: Se observó un patrón de cambios en el tejido urbano, con la ocupación de suelo para la construcción de viviendas irregulares.
  • Expansión de los perímetros periurbanos: Los límites entre las zonas urbanas y rurales se están expandiendo, lo que indica un proceso de periurbanización en curso.
  • Problemas de uso y deterioro del suelo urbanizado: Ciertas zonas urbanizadas se enfrentan a problemas de uso y deterioro, a pesar de estar desocupadas.
  • Urbanizaciones marginales y paisajes de baja densidad: Las áreas marginales se están urbanizando, lo que resulta en entornos con baja densidad de población y configuraciones en red.
  • Ocupaciones en los rangos de transición: Las ocupaciones humanas están presentes en los rangos de transición entre las áreas urbanas y rurales, lo que indica una interacción compleja entre los dos tipos de entorno.

Metodología del proyecto

En el proceso de elaboración de la metodología para la aplicación y desarrollo del proyecto, se evidenció que no es posible promover la promoción de la agricultura local sin considerar algunos aspectos estructurales que son esenciales para asegurar el éxito y la sostenibilidad de las iniciativas. El primer aspecto crucial se refiere al apoyo a la infraestructura básica, como la recolección de basura, el sistema de microdrenaje y el acceso al agua potable. Ignorar estos aspectos puede poner en grave peligro la viabilidad de la agricultura local. Por ejemplo, la falta de recolección de basura y la ausencia de una disposición adecuada de los desechos pueden contaminar el suelo, dañando los cultivos. Del mismo modo, la falta de un sistema de microdrenaje eficiente aumenta el riesgo de inundaciones, lo que puede hacer inviables las actividades

agrícolas. Además, la disponibilidad de agua potable es fundamental para asegurar la continuidad de Agro Vilas.

El segundo aspecto a tener en cuenta es el económico. Es fundamental pensar en el destino de los alimentos que se van a producir, porque sin un mercado definido, se corre el riesgo de que los productos agrícolas se echen a perder y pierdan su valor comercial. Por ello, es fundamental establecer alianzas comerciales sólidas y garantizar la demanda de los productos cultivados en el Agro Vilas, asegurando así la viabilidad económica del proyecto a medio y largo plazo.

El tercer aspecto de suma importancia se refiere a la mano de obra necesaria para operar y mantener el proyecto. Dado que el objetivo es revitalizar los espacios verdes en áreas que ya están urbanizadas y no se utilizan de manera sostenible, es necesario empoderar e involucrar a las familias locales en este proceso. Esto implica programas de capacitación y capacitación para que estas familias puedan participar activamente en la implementación y gestión del Agro Vilas, asegurando así la continuidad y el éxito del proyecto a largo plazo.

Proceso del proyecto

Considerando todas las debilidades identificadas y el objetivo claramente definido -como la promoción del uso sostenible de las áreas verdes en el área periurbana, a través del estímulo de la agricultura y la reforestación para evitar ocupaciones informales- se delineó un proceso de implementación del proyecto a ejecutar para la implementación del Agro Vilas, que se convertirá en un Corredor Agroecológico.

FASE 1: Elegir el área de despliegue del proyecto
1.1 Delimitar el área y analizar la topografía
1.2 Identificar de quién es la propiedad del suelo
1.3 Analizar la calidad del suelo para el cultivo
1.4 Realizar el trámite de legalización/derecho de uso de la tierra

FASE 2: Analizar la infraestructura básica ya existente
2.1 Identificar si la región tiene acceso a la recolección de elementos no utilizados
2.2 Identificar si la región tiene acceso a saneamiento (saneamiento rural)
2.3 Identificar si la región tiene drenaje
2.4 Establecer una asociación y cobrar a los concesionarios responsables de la prestación de este servicio (si ya está concesionado), si no es una concesión, actuar con los municipios

FASE 3: Empoderar a las personas para que hagan un mejor uso del suelo
3.1 Identificar el mejor tipo de cultivo para cultivar
3.2 Empoderar a los agricultores y residentes locales
3.3 Proporcionar plántulas y equipos para el desarrollo de capacidades
3.4 Financiación del desarrollo de capacidades

FASE 4: Crear y adoptar los mecanismos legales necesarios para la venta de alimentos
4.1 Reúna los documentos necesarios
4.2 Abrir legalmente una cooperativa alimentaria
4.3 Preparar los documentos necesarios

FASE 5: Creación de demanda para la venta de alimentos
5.1 Estudiar la producción potencial de alimentos
5.2 Analizar el mercado potencial
5.3 Contrato de diseño para la compraventa de los alimentos producidos

FASE 6: Creación de huertos comunitarios
6.1 Crear mecanismos colaborativos de huertos comunitarios
6.2 Involucrar a la comunidad local

6.3 Producir alimentos para el huerto comunitario

FASE 7: Compromiso con la comunidad local
(en desarrollo)

Resumen del flujo

Al final de la implementación de todos los procesos mencionados anteriormente, el objetivo es crear un proyecto autosostenible, independiente del apoyo estatal y capaz de mantenerse a largo plazo, contando ya con toda la infraestructura necesaria, así como con los mecanismos para la comercialización de alimentos.

Para viabilizar la implementación, es fundamental que las acciones e intervenciones cuenten con varios mecanismos de financiamiento. De esta manera, se podrá garantizar la ejecución del proyecto, incluyendo la adquisición de recursos, la capacitación de mano de obra local, la implementación de infraestructuras básicas y la creación de sistemas de comercialización de alimentos. La diversificación de los recursos financieros es crucial para garantizar la sostenibilidad económica del proyecto y su capacidad para operar de forma autónoma a largo plazo.

Prototipo

A partir de estos procesos, Agro Vila de Itaboraí con 36 hectares fue elegida para la aplicación de un prototipo del Corredor Agroecológico.

La elección de esta zona se debe a sus características de ocupación, al estar totalmente rodeada de grandes aglomeraciones urbanas. Donde queda un solo espacio verde.

En esta zona se establecerá una delimitación de la zona de amortiguamiento, creando una barrera natural entre el casco urbano y la zona verde. La barrera natural de contención, con una longitud de 71 km, tiene como objetivo evitar la invasión de aglomeraciones ya consolidadas en la zona verde.

Es importante tener en cuenta que la barrera de contención antes mencionada no implica la construcción de muros o cercas de alambre. Por el contrario, la barrera puede establecerse a través de la implementación de árboles grandes provenientes de proyectos de reforestación, huertos comunitarios que crean zonas de amortiguamiento y/o parques infantiles naturales que brindan funciones sociales con el fin de crear valor y sentido de pertenencia para la población.

A través de las imágenes de Google Street View es posible constatar la ausencia de algunos servicios básicos que se mencionan como aspectos a considerar, como la recolección de basura y el drenaje. 

Para la intervención en la zona, se subdividió en cinco bloques, cada uno con una funcionalidad específica. Aunque el alcance del proyecto se centra en el área de 36 hectáreas, su impacto social y económico puede trascender los límites físicos del proyecto. Esto se refleja en la promoción de la empleabilidad local y la facilitación del acceso a alimentos de calidad para la población aledaña, a través de huertos comunitarios.

Así, las intervenciones a realizar en el Agro Vila de Itaboraí son:

Se trata de una zona adyacente a una calle susceptible a inundaciones, lo que requiere una intervención para proteger la plantación y evitar molestias a las familias vecinas. La intervención prevista en este emplazamiento consiste en la creación de un parque lineal de inundación, diseñado para absorber el agua de las inundaciones y evitar que llegue a zonas que no deberían verse afectadas.

Un mecanismo de financiación viable para esta acción es el Plazo de Ajuste de Conducta (TAC). Este instrumento se utiliza a menudo en Brasil cuando las empresas privadas hacen un mal uso de los recursos naturales o contaminan el medio ambiente. Como forma de compensación, estas empresas se comprometen a firmar un TAC y realizar acciones de reforestación, contribuyendo así a la preservación y recuperación de los ecosistemas.

Esta zona se encuentra entre el parque inundable y la región de cultivo de alimentos, lo que requiere que la actividad desarrollada en este punto se base en suelos permeables, con el fin de servir como zona de amortiguamiento ante posibles inundaciones no deseadas, preservando al mismo tiempo la biodiversidad local. Por lo tanto, la intervención prevista consiste en la reforestación de la zona.

Debido a la naturaleza del proyecto de reforestación, también podrá aplicarse el mecanismo de financiamiento antes mencionado, el Plazo de Ajuste de Conducta (TAC).

Esta zona es de fácil acceso, situada muy cerca de calles pavimentadas, lo que la convierte en un lugar ideal para la logística y el transporte de los alimentos cultivados. Además, la accesibilidad que proporcionan los caminos asfaltados facilita el uso del espacio como centro de formación, facilitando la labor de las personas que se van a formar.

Para viabilizar este centro de formación y logística, es posible buscar financiación en fondos de formación o proyectos sostenibles. Por lo general, estos fondos están destinados a apoyar iniciativas que promuevan el desarrollo humano y económico, así como la sostenibilidad ambiental. Por lo tanto, un centro de formación y logística para la agricultura sostenible sería una aplicación adecuada para recibir este tipo de financiación.

Con el fin de evitar cualquier posibilidad de contaminación del suelo debido a la disposición inadecuada de los residuos, es fundamental verificar y fortalecer, en colaboración con el municipio y el concesionario local responsable, las rutas de recolección de residuos en las inmediaciones del área de operación del proyecto. Con esta medida se pretende garantizar que exista una recogida adecuada y eficiente de la basura, evitando así cualquier impacto negativo sobre el suelo y el medio ambiente.

Debido a su extensión, topografía plana, abundancia de vegetación y distancia de zonas susceptibles de inundación, esta región es altamente propicia para la práctica del cultivo de alimentos. Su topografía plana facilita el manejo agrícola, facilitando la siembra y cosecha de alimentos. Además, la presencia de vegetación verde sugiere la existencia de suelos fértiles y condiciones ambientales favorables para el crecimiento de las plantas.

La distancia de las zonas susceptibles a inundaciones reduce significativamente el riesgo de pérdidas causadas por fenómenos meteorológicos extremos, proporcionando una mayor seguridad para la producción agrícola. Esto permite a los agricultores cultivar alimentos de manera más predecible y estable, sin el riesgo de daños por inundaciones repentinas.

Para viabilizar esta intervención, la inversión necesaria puede provenir de fondos de financiamiento para proyectos sostenibles e inversiones estatales.

Viabilidad del cultivo y la venta de alimentos

Respetando la cultura de cultivo de la Región Metropolitana de Río de Janeiro, junto con los precios de los alimentos según el Gobierno del Estado de Río de Janeiro.

Para este Agro Village, es interesante cultivar naranjas, yuca, berenjenas, batatas, pimientos, quimbombó y jiló. Considerando un estudio preliminar que considera el momento de cosecha y el espacio necesario para cada una, dentro del espacio disponible de 18 hectáreas y también su precio promedio de venta en el estado, los alimentos se distribuyeron en la zona de la siguiente manera:

Comparación de possibilidad de salarios

Suponiendo que la empresa emplea a 150 personas y que el monto de los ingresos brutos se destina al mantenimiento, insumos, etc. y el otro monto se utiliza para pagar a los 150 trabajadores, cada persona recibe $ 926,58 dólares, lo que equivale a 3 veces el salario mínimo nacional brasileño.

Compromiso y pertenencia

Huerto comunitario

La promoción de huertos comunitarios tiene como objetivo generar valor de impacto tanto para la comunidad local como para las comunidades aledañas. La iniciativa no solo proporciona alimentos frescos y saludables a los residentes locales, sino que también promueve la inclusión social, la educación ambiental y los beneficios para la salud. Por lo tanto, la iniciativa tiene el potencial de crear un impacto positivo duradero.

Sello de procedencia

La creación de un sello de origen para los alimentos cultivados en el proyecto representa un paso significativo para asegurar la calidad, autenticidad y valor agregado de los productos de las Agroaldeas del Corredor Agroecológico. Este sello no solo certifica el origen de los alimentos, sino que también transmite confianza a los consumidores, destacando los estándares de producción sostenible, responsabilidad social y respeto al medio ambiente adoptados por el proyecto.

Además, el sello de origen contribuye a promover la identidad local y a valorar los productos cultivados por las comunidades, sumando una ventaja competitiva en el mercado. A través de este sello, los consumidores pueden reconocer y valorar el trabajo realizado por las familias locales, fomentando el consumo de alimentos producidos de forma ética y sostenible.

Al establecer criterios estrictos para la concesión del sello de origen, como las prácticas de agricultura ecológica, el uso responsable de los recursos naturales y las buenas condiciones de trabajo de los agricultores, el proyecto demuestra su compromiso con la calidad y la transparencia en toda la cadena de producción.

Además, el sello de origen puede abrir las puertas a nuevas oportunidades de mercado, facilitando el acceso a programas de distribución de alimentos en escuelas, hospitales y restaurantes locales, así como la participación en ferias y eventos regionales y nacionales.