La relación de las ciudades con los ríos ha estado marcada por siglos de explotación, degradación y desconexión. Este proyecto busca rescatar el potencial transformador de los ríos urbanos, replanteando São Paulo desde sus aguas y bajo un modelo latinoamericano basado en la coexistencia con el entorno natural.

“Vivemos em uma cidade biofóbica. Acham que a raiz da árvore estraga a calçada, que a folha entope a calha, que o rio inunda e traz mau cheiro. A gente vai se afastando do que é natural. Nosso processo é repensar nossa relação com o que é vivo. O cuidado com os rios não é uma poesia. É proteger o que é vivo. É um trabalho de transformação do nosso olhar”

José Bueno, urbanista

La ciudad de São Paulo refleja una desconexión con la naturaleza. Debemos repensar nuestra relación con lo vivo, el proyecto propone transformar la visión sobre los ríos urbanos. No se trata solo de una cuestión poética, sino de supervivencia y resiliencia.

A lo largo de la historia, observamos distintas formas de interacción con los ríos:

  • En Europa y Asia, los ríos fueron dominados para el comercio y la expansión territorial, a menudo con impacto ambiental significativo.
  • En las Américas, los pueblos originarios vivían en coexistencia con el agua, respetando los ciclos naturales.

El contraste histórico nos invita a reflexionar sobre cómo integrar estas visiones en un modelo contemporáneo.

Cómo reimaginar São Paulo dejando atrás el modelo eurocéntrico y creando un modelo latinoamericano basado en la coexistencia con el agua y sus ríos?

Durante el siglo XIX y XX, los ríos como el Tietê y el Tamanduateí fueron canalizados, desconectando a la ciudad de su entorno natural. Los planes urbanos, como el Plan de Avenidas de Prestes Maia, priorizaron la infraestructura vial sobre la preservación de los ríos.

Actualmente, las áreas propensas a inundaciones evidencian la necesidad de replantear la relación de la ciudad con sus aguas.

El proyecto propone analizar la relación entre la ciudad y sus ríos utilizando una analogía basada en los diferentes tramos de un río. Esta perspectiva permite entender cómo las intervenciones pueden variar en función de las dinámicas locales, barriales, urbanas y territoriales.

FUENTE – LOCAL
Representa el origen del ciclo hídrico y los pequeños flujos que alimentan los sistemas mayores. En esta escala, las intervenciones se centran en comunidades específicas o barrios pequeños. Ejemplos incluyen la recuperación de nacientes urbanas, la creación de jardines de lluvia y sistemas de captación de agua que fomenten una gestión sostenible a nivel local.

AFLUENTE – BARRIAL
Los afluentes simbolizan la conexión entre varios flujos menores hacia un curso mayor. En esta escala, se abordan las interacciones entre múltiples barrios o comunidades que comparten un mismo río o cuerpo de agua. Las intervenciones pueden incluir la implementación de corredores verdes interbarriales, la revitalización de arroyos secundarios y el diseño de espacios públicos que fomenten el sentido de comunidad.

MEANDRO Y LLANURA DE INUNDACIÓN – URBANO
Los meandros representan las áreas de mayor interacción entre el río y la ciudad, donde los impactos de las intervenciones son más visibles. En esta escala, se plantean estrategias urbanas como la creación de parques lineales en las márgenes, la renaturalización de tramos canalizados y soluciones para mitigar inundaciones. También se busca integrar los ríos en el tejido urbano, promoviendo su uso como espacios de recreación y movilidad activa.

RÍO – TERRITORIAL
El río principal conecta diferentes regiones, simbolizando la interdependencia entre áreas locales, barriales y urbanas. En esta escala, las intervenciones se enfocan en la gestión integrada de las cuencas hidrográficas, con políticas que aborden la gobernanza del agua a nivel regional. Esto incluye la planificación de infraestructuras sostenibles, sistemas de transporte fluvial y la preservación de los ecosistemas asociados.

El escalonamiento permite abordar la complejidad de los ríos urbanos desde una perspectiva integrada, considerando tanto las necesidades locales como los desafíos a nivel metropolitano.